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La uva Syrah es una variedad de uva tinta que se cultiva en todo el mundo. Se utiliza para la producción de vino tinto. Su origen no está claro, unos dicen que proviene de Francia y otros de Siracusa (Italia). Gran parte de su plantación se encuentra en el centro y sur de Francia, llegando a considerarla una variedad originaria del Ródano. Es la tercera variedad tinta tras la Cabernet Savignon y la Pinot Noir. También con el syrah se elaboran vinos rosados, también se mezcla con el Cabernet Savignon. En Australia los vinos producidos con esta variedad son muy famosos. Esta variedad también se encuentra en California, Argentina y Chile. En España se puede encontrar esta variedad de uva en todo el territorio, es cultivada para su elaboración junto con otras variedades.
Esta variedad de uva es de fácil cultivo y requiere de mucho sol y de temperaturas altas.
Sus hojas son de tamaño mediano con forma pentágona, los senos laterales están muy marcados, con el haz verde oscuro y envés algodonoso. El tamaño del racimo es mediano, de forma cilíndrica y formada por uvas de pequeño tamaño, de color azulado y de piel espesa.
El resultado de esta variedad es un vino amable y sabroso, su profundo aroma es de frutas silvestres y violetas con ligeros toques ahumados. De color refinado, intenso, especiado, austero. Destaca su acidez alta.
Vino joven, sus colores son muy oscuros e intensos con toques rojo grosella o violeta.
Los aromas primarios son la trufa, violeta, cuero. Los Syrah jóvenes tienen otros aromas muy agradables a cassis, violeta, higos, frutos secos, vainilla, mermelada de ciruela, grosella negra y zarzamora. Los Syrah crianza tienen otros aromas ligeros con algún toque ahumado, aromas a higos secos, coco, trufa, aceituna negra, especias.
Muestra un sabor untuoso, vigoroso con buen grado de alcohol, suave y con gran cantidad de taninos que reducen su astringencia durante su crianza en barricas, produciendo una mejora en sus propiedades naturales del cepaje. Habilitándolo para largas estibas en botella. Los sabores predominantes son a cassis, grosella negra, mermelada de ciruelas y zarzamora, y con unos sabores especiados que dejan un recuerdo prolongado en la boca.
Es un vino que se puede beber joven, en ese momento presenta aromas agradables y notas frescas. La Syrah produce vinos muy sólidos, vigorosos, ricos en taninos y sobre todo de larga conservación, es por ello que sienta bien la crianza tanto en madera como en añejamiento en botella. El proceso de envejecimiento es rápido pero contiene gran calidad y resiste a la oxidación. Todas estas propiedades hacen que se puedan consumir pronto o también con un tiempo largo de crianza. La evolución de estos vinos es favorable con el tiempo.
El Syrah es perfecto para acompañar carnes de caza como conejo, ciervo y jabalí. También con carne de pavo, cerdo. Comidas picantes, fiambres y quesos de cabra.
La temperatura ideal para servir el vino Syrah jóven es de 16°-19° esto permite que tanto sus aromas como sus sabores destaquen. Para un vino de guarda la temperatura aconsejable es de 18°-20°, sería necesario para este último utilizar un decantador una hora antes de consumirlo.
628931750 – 626900720 – 965707818